Como todos los miércoles, se producía la sesión de control al gobierno y todos esperabamos que el Partido Popular siguiera con las preguntas al vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, a Alfredo Pérez Rubalcaba sobre el Caso Faisán. Esta vez los populares se han centrado en Manuel Chaves y el caso de los eres irregulares que han salido en Andalucía y, para no variar, han pedido su dimisión.
El diputado del PP, Ricardo Tarno, ha acusado a Chaves de «favorecer a los socialistas andaluces que se pueden jubilar sin haber trabajado». A lo que Manuel Chaves ha contestado: «Quieren situar a mis hijos en el centro del debate político y mis hijos no son políticos. Si les acusan de algo, deben ir a los tribunales», que además ha recordado que hace dos años, en las elecciones europeas, acusaron a su hija de lo mismo y acusa al PP de atacar siempre a su familia cuando «meten en sus listas a imputados por delitos muy graves». «Ustedes se ponen el Estado de derecho por montera».
Por otro lado, la Junta de Andalucía quiere evitar que el ex-presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, declara ante los Tribunales por el expediente sancionador abierto por orden judicial. Para ello el gobierno autonómico ha recurrido ante el Tribunal Supremo la sentencia del Tribunal Superior de Justicia Andaluz, considerando que ese fallo judicial «incurre en infracción del derecho al honor reconocido a todas las personas»
Mª Carmen Pérez Pérez